Escapadas: GSTAAD
En esta ocasión, queremos llevarlos a un destino que ha ganado popularidad entre la comunidad LGBTQ+: Gstaad, Suiza.
Gstaad es un encantador pueblo alpino ubicado en el cantón de Berna. Es conocido por ser un destino de esquí de primera clase y por sus paisajes impresionantes, pero lo que lo hace especial para la comunidad LGBTQ+ es su ambiente amigable y acogedor.
El pueblo de Gstaad es pequeño y pintoresco, pero cuenta con una gran variedad de opciones para el viajero LGBTQ+. Desde hoteles exclusivos para adultos hasta spas gay-friendly y restaurantes que sirven comida orgánica y de alta calidad, Gstaad tiene algo para todos los gustos.
Uno de los hoteles más destacados en la zona es The Alpina Gstaad, un hotel de cinco estrellas que ofrece una experiencia lujosa y exclusiva. Este hotel es uno de los más populares entre los viajeros LGBTQ+ por su ambiente acogedor y su diseño moderno.
La región del suroeste de Suiza impresiona con su irresistible encanto alpino. Perfecta para deambular por las idílicas montañas, sumergir los pies en los riachuelos fríos y estirar las pantorrillas hacia el sol. Placer de caminar con todos los sentidos: desaceleración y agarre al mismo tiempo. Después de un día al aire libre, le espera una merecida relajación en la zona de spa de uno de los siete hoteles de bienestar galardonados.
NOCHE EN UN IGLÚ PARA PAREJAS GSTAAD
Pasar la noche en Gstaad Igloo Village es una experiencia verdaderamente única que implica mucho más que dormir en un iglú. Disfrutará de una fondue de queso, una caminata guiada con raquetas de nieve por la noche, tiempo para disfrutar de la bañera de hidromasaje y la sauna, y un desayuno en el restaurante de montaña. Esta es una aventura invernal que hará que quieras acurrucarte y ponerte cómodo.
Una noche inolvidable en Iglu-Dorf Gstaad incluye algo más que dormir en un iglú. Tu experiencia consiste en una fondue de queso , una caminata guiada con raquetas de nieve bajo el cielo estrellado, tiempo para disfrutar del jacuzzi y la sauna , y desayuno en el restaurante de montaña.
Entonces ¿qué esperas?
